Hotel Flamboyanes en Mérida, Yucatán.
Uy de los mejores hoteles donde me he quedado. El hotel tenía alberca y jacuzzi aunque no tuve la oportunidad de disfrutarlos. Bueno lo que si disfruté, fue la tina de baño de la habitación, ni modo de dejarla pasar así nomás nononono. Claro que me metí =P.
Hotel Los Candiles en Colima.
No era muy lujoso pero se defendía. También tenía alberca aunque por el clima ni hacía falta meterse al agua jiji.
Hotel Belmar en Puerto Vallarta.
No es el hotel que queríamos, más bien el que completabamos. Aún así estaba ubicado a 2 cuadras del mercado, y a unas cuantas cuadras más del malecón. Lo que aquí no se resolvía caminando se resolvía en camionazo. Hasta cómoda nos resultó la habitación con balcón. Un elevador si se hubiera agradecido =P
Hotel Astromundo en Reynosa, Tamaulipas.
Pasé un buen tiempo en este hotel así que le di vuelta a muchas de las habitaciones y esta es la más grande en la que estuve. Hasta mesita para comer tenía. Todo iba bien en esta habitación hasta que el frío llegó, pues como quedaba en una esquina el frío me llegaba por 2 frentes. Con todo y la calefacción me di una enfermadota y en esa mesita me compia mis calditos calientes. Lo bueno de esta habitación fue el día en que se fue la luz en todo el hotel y hasta en la calle. Amaneció y yo tenía 2 ventanas por donde recibir la luz del día. A la semana siguiente me colocarían en la misma habitación pero ahi si pedí que me cambiaran a una normalita, por aquello de los frios que todavía pegaban... prefiero estar sana que con luz.
Mismo hotel pero en habitación pues normalita, una sola ventana y sin mesita. De ahi en fuera no hay gran diferencia.
Aún faltan más hoteles y más ciudades por recorrer así que la colección sigue.
