Un descanso

Y luego me fuí de vacaciones a Cancún.

Meses y meses pagando el viajecito, apurando a la gente para que paguen, contando el tiempo para que llegue el día, etc. No puedo creer que hasta organizar un viaje fuera a resultar estresante. Así que llegando a la playita mi objetivo principal era descansar. No quería asolearme, no buscaba estar despierta hasta la madrugada. Quería olvidarme del trabajo, de lo pendientes. Sencillamente buscaba un descanso.

Bien por Magnicharters

Desde que te registras en el aeropuerto para que te den tus pases de abordar el trato es amable, nos dieron a escoger lugares y ya en el avion solo esperabamos unas papas o una galleta, pero nos sorprendieron con un sandwich, papas, refresco y un chocolate. Ah y al salir del avion unos dulcitos. Bajas del avion y ya te estan esperando, te asignan autobus para el traslado al aeropuerto y un folleto ya etiquetado con tu nombre. En todo momento se portaron muy bien, así que lo recomiendo ampliamente.

Mal por el barco pirata

Yo iba con la firme intención de subirme al barco pirata y ser secuestrada durante el espectáculo por los piratas y nada... que era para niños el show y como no llevo niños pues me quedé con las ganas. Pero algún día volveré y llevaré niños y les diré: mira mijito lo que siempre quisiste, subirte al barco pirata!! jaja ya me imagino al pobre niño poniendo cara de 'yo lo que queiro es subirme a la moto acuatica'.

Ahi están los barcos estacionados

La travesurita
Nos pusimos a hacernos tatuajes de henna un día en la noche y les dejamos un recuerdito en el hotel:

No se cual cara habrá estado peor

a) la de la chica que se dió cuenta en la madrugada del chistorete que dejó en la sábana creyendo que era la unica

b) la cara de la camarista cuando vió tremendas manchas

c) la mía el empezar a hacer cuentas de lo que nos podría salir el cuentononón considerando que la botella de agua te la venden en $30

Toda una experiencia

Y ya que no me había podido subir al barco pirata pues me fui con una de mis amigas con los delfines. Son  lindisimos, parecen niñitos. Sale caro el chistecito pero sí vale la pena.

La alberca de los vecinos

El hotel de al lado estaba solo, lo notamos desde el principio. Su alberca siempre estaba sola (a diferencia del hotel donde nos quedamos) así que aprovechabamos para irnos a esos camastros a disfrutar de la tranquilidad que había ahí

Lo extraño es que a los dos días la cerraron con todo y hotel y ya no pudimos pasar.

Misión cumplida
Los días que pasamos en cancún creo que todas lo disfrutamos, cada una a su modo. Yo espero volver porque sigo pendiente con el barco pirata, además que cancún es mucho para ir solo 3 días.