miércoles, 15 de abril de 2009

Kaaaaaaliiiiimaaaan!

Hoy por la mañana me eché un viajecín al pasado mientras iba en el taxi al trabajo. Aunque el trayecto es muy corto, noté que el taxista iba escuchando una radionovela, "El Ojo de Vidrio" para ser más precisa. Mientras escuchaba la radionovela mi mente se transportó a mi época de la infancia, más o menos a los 4 años, empecé a recordar las radionovelas que escuchaba mi papá. Por supuesto el ojo de vidrio, no estoy segura pero el nombre de "chucho el roto" también me suena y la que más recuerdo: Kaliman.


No se de qué se trataba cada una, pues ni si quiera les ponía atención, era yo muy chica y escuchar una radionovela no era lo más divertido del mundo. ¿Qué por qué me ponía a escuchar estas novelitas? Pues porque era de ley que mi papá se chutaba todas las novelas antes de que fueramos por la leche a la "lechería" de la "conasupo".


Entonces mis vagos recuerdos de esa época se limitan a lo dramático de los dialogos, a la aburrida espera antes de ir a la leche con nuestra tinita roja (¿o era azul?), que me la pasaba diciendole a mi papá ¿ya vamos? y que me decía "orita que se acabe la novela" jajaja pero sobre todo recuerdo a una voz fuerte con eco que decía: Kaaaaaaaaliiiiiiiiimaaaaaaan!!


Lo que escuché hoy fué sólo una escena del ojo de vidrio y lo único que noté fué que la escena duró mucho, todo el camino para meter el auto al garage me pareció demaciado. Es de esperarse pues las radionovelas se basan en las aplias descripciones para hacer imaginar al radioescucha. El sólo pensar que una escena de novela de televición dure tanto como lo de la radionovela me da una flojera que podría jurar que todo mundo se desesperaría al ver que su novela no avanza.


Aún con tanto escuchar al tal Kaaaaaaaaliiiiiiiimaaaaaan! jamás me hize una imagen de él en la mente. Al ojo de vidrio me lo imaginaba viejo, con sombrero de copa y de traje muy antigüo y con un monóculo en lugar del ojo de vidrio. La imagen de chucho el roto en mi mente era más bien como la de Sansón, así grandote y fuertesote jajaja. Pero al tal Kalimán nunca lo imaginé. Fué hasta que por televisión pasaron la pelicula de Kalimán, era un tipo con traje blanco y turbante en la cabeza... jamás lo hubiera imaginado así. Esa imagen la vi ya más grandecita y no, no me chuté la película pues el recuerdo que tengo guardado en mi mente es que se trata de una historia que me aburría a morir jajaja.


Ah por cierto sigo sin saber de que se trata la historia de Kaliman, pero dejo una liga que me encontré y que contiene aquella voz que decía: Kaaaaaaaaliiiiiiiimaaaaaaaaan para que sepan porque demonios se me quedó tan grabada =P.





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